Novata
Publicado: 15 Feb 2010 19:24
¡Hola a todos!
Mi nombre es Guadalupe, aunque ya saben, Lupita para los amigos. Soy de la Ciudad de México. Les cuento que desde pequeña me ha gustado armar puzzles, aquellos que mis padres me obsequiaban de manera usual, aunque nunca se formó una afición. Posteriormente, durante algunos años, de manera ocasional, ensamblaba algunos. Pero no fue hasta hace algunos meses que comencé con está locura de armar uno tras otro sin frenar (y no es broma).
Seguramente se preguntarán qué lo originó. Bueno, tengo un trabajo en el que se labora a presión, y que me genera mucho estrés. Buscando entre varias alternativas para calmar eso (entre aparatos de masaje, tés, libros de autoestima, medicamentos y otros) un día me topé con una juguetería, donde me reencontré con los tan estimados puzzles. Me animé a adquirir uno de 1000 piezas con la imagen de los atractivos de California, E.U., el cual armé en menos de lo que canta un gallo y tuve como resultado un inesperado descenso de estrés. Así que después adquirí uno de globitos aerostáticos, luego el de La última cena, el de La boveda de la Capilla Sixtina, y así me fuí enrolando hasta ahora tener una colección si no extensa, sí que va incrementándose en cada momento.
Ahora estoy armando uno cuya imagen es un otoño de Nueva Zelanda. En realidad, adquirí éste porque costaba 100 pesos mexicanos, mucho más barato que otros. Les cuento que el gasto de estos jueguitos me ha desfalcado. Aquí, en México, son muy caros, por ejemplo, los precios de puzzles de 1000 piezas fluctúan de los 200 a los 800 pesos mexicanos. Generalmente, los puzzles los adquiero en diversas tiendas, pues en este país hay poca variedad, por lo que tengo que andar buscando en distintas tiendas.
Los rompecabezas (puzzles en inglés) que me gustan son los de obras de arte, generalmente son de 1000 a 1500 piezas. El que más me ha gustado es el del Calendario Azteca (mi avatar), el cual me llevó mucho tiempo armar.
Por todo lo anterior me considero una Puzzlera Constructora.
En fin, fue una presentación exhaustiva, espero no haberlos dormido... jijiji... sorry.
Por último, GRACIAS POR EXISTIR Y FORMAR PARTE DE ESTE ROMPECABEZAS LLAMADO VIDA.
Mi nombre es Guadalupe, aunque ya saben, Lupita para los amigos. Soy de la Ciudad de México. Les cuento que desde pequeña me ha gustado armar puzzles, aquellos que mis padres me obsequiaban de manera usual, aunque nunca se formó una afición. Posteriormente, durante algunos años, de manera ocasional, ensamblaba algunos. Pero no fue hasta hace algunos meses que comencé con está locura de armar uno tras otro sin frenar (y no es broma).
Seguramente se preguntarán qué lo originó. Bueno, tengo un trabajo en el que se labora a presión, y que me genera mucho estrés. Buscando entre varias alternativas para calmar eso (entre aparatos de masaje, tés, libros de autoestima, medicamentos y otros) un día me topé con una juguetería, donde me reencontré con los tan estimados puzzles. Me animé a adquirir uno de 1000 piezas con la imagen de los atractivos de California, E.U., el cual armé en menos de lo que canta un gallo y tuve como resultado un inesperado descenso de estrés. Así que después adquirí uno de globitos aerostáticos, luego el de La última cena, el de La boveda de la Capilla Sixtina, y así me fuí enrolando hasta ahora tener una colección si no extensa, sí que va incrementándose en cada momento.
Ahora estoy armando uno cuya imagen es un otoño de Nueva Zelanda. En realidad, adquirí éste porque costaba 100 pesos mexicanos, mucho más barato que otros. Les cuento que el gasto de estos jueguitos me ha desfalcado. Aquí, en México, son muy caros, por ejemplo, los precios de puzzles de 1000 piezas fluctúan de los 200 a los 800 pesos mexicanos. Generalmente, los puzzles los adquiero en diversas tiendas, pues en este país hay poca variedad, por lo que tengo que andar buscando en distintas tiendas.
Los rompecabezas (puzzles en inglés) que me gustan son los de obras de arte, generalmente son de 1000 a 1500 piezas. El que más me ha gustado es el del Calendario Azteca (mi avatar), el cual me llevó mucho tiempo armar.
Por todo lo anterior me considero una Puzzlera Constructora.
En fin, fue una presentación exhaustiva, espero no haberlos dormido... jijiji... sorry.
Por último, GRACIAS POR EXISTIR Y FORMAR PARTE DE ESTE ROMPECABEZAS LLAMADO VIDA.