A ver, a modo de presentación: me podéis llamar mafaldapino, escribo desde Almansa, un pueblo estupendo de Albacete. Mi experiencia con los puzzles se resume en haber conseguido realizar seis o siete, y cada vez los hago de más piezas. Ahora voy al ataque a por uno de 6.000, a ver si puedo con él. Mis temas favoritos son las pinturas de artistas tipo Dalí, Cezanne o Velázquez, y los monumentos, obras de arte, en fin, ese tipo de cosas.
Hasta la fecha cuando terminaba un puzzle lo pegaba en un tablero finito de marquetería y lo arrinconaba en alguna parte de la casa, pero ahora estoy decidida a sacar una buena foto del resultado final, desmontarlo y después cambiarlo por otro o venderlo. Porque a mí lo que me gusta es hacerlos, pero después.... ya no sirven para nada. Un puzzle resuelto es la cosa más inútil del mundo, me parece a mí.
Y vaya rollo que estoy metiendo, madre mía! Ala, ya me callo!
