Encargue un tablero gigante al carpintero del pueblo y en la casa de mi abuela monté una habitación para hacerlo.
Pues llegó el verano y empecé con ayuda de Alejandro porque mi hermano ni aparecía por la habitación.
Comenzamos con muchas ganas pero en cuanto vimos tantas piezas marrones y negras nos empezamos a agobiar.
Me arrepentí un montón de haberlo comprado, lo quería vender o guardar para que algún día alguien lo hiciera porque por mas que lo miraba no era capaz de continuar.
Ha estado más de un año tapado con una sábana casi sin tocarlo hasta que a raiz de “ la ultima cena, rutera” pensé en traerme las bolsas a Madrid y hacerlo aquí poco a poco.¡cómo no se me ocurrió antes!
Así que después que acabé mis vacaciones en julio empecé la primera bolsa.
Lo he ido haciendo en dos cartones porque no tengo sitio para hacerlo de una vez. En un cartón puse 1400 piezas y en el otro 1100. He ido separando las piezas en la medida que me ha ido haciendo falta ya que me desespera separar toda la bolsa de una vez. Las unicas que separé desde el primer momento fueron las raras y embarazadas.
Ha sido un poco dificil ya que hay demasiadas piezas oscuras y en muchos casos he tenido que poner la piezas al sol para poder diferenciar bien los colores.Os pongo unas fotos del largo proceso




Después de más o menos un mes he acabado la primera bolsa, por fin


Si os fijáis en la foto veréis que las piezas de los cartones no está unidas. El cartón esta estropeado de tanto usarlo y me daba miedo que se destrozase el puzzle al hacer la foto.
Una vez que se hice la foto, lo he guardado a trocitos en una caja para llevarlo al pueblo cuando vuelve a ir y me he puesto con la segundo bolsa.
Seguiré informando...
Nota:He editado las fotos para que las veáis más grande